Pensamientos y Sentimientos

¿La última vez? 


Hoy me di cuenta de algo, algo en lo que no paramos a pensar, algo que poca gente experimenta. Valoramos mucho todas las cosas insignificantes que tenemos o no, en vez de las cosas que realmente son importantes. Trabajamos y trabajamos, para conseguir tener cosas, ¿pero realmente importan? Estamos mal si no conseguimos un coche, nos enfadamos, pero ¿enserio merece la pena? Nos duele cuando no estamos con alguien, cuando no somos correspondidos, cuando nos engañan, cuando nos mienten, etc... Vale eso tiene más lógica, pero ¿enserio por eso sufrimos hasta el punto de perder aveces el norte? ¿De dejar de hablar a los amigos?  ¿No saber perdonar? E incluso, ¿ no hablar con esa persona? ¿No dar una segunda oportunidad? ¿No aclarar las cosas? 
Hoy vi, que tiramos todo eso como si nada, sin más. Dejamos de hablarnos, dejamos a amigos de lado, dejamos a gente que era importante, dejamos personas que queríamos demasiado. ¿Todo por que? ¿Orgullo, dignidad, prepotencia, dolor...? Y ahora yo me pregunto, ¿para que todo eso? Imagínate que nunca más verás a esa persona que fue especial, imagina que no vas a tener oportunidad de volver a saber nada de ella. ¿Como te sentirias, seguirias haciendo lo mismo? No valoramos lo que tenemos Porque pensamos que no lo perderemos, pero eso no lo sabemos. Quien sabe si mañana no tengo la oportunidad de decirle a mis padres, mis amig@s, mis herman@s, etc... lo que los quiero. ¿quien sabe si mañana volveremos a verl@s?  Y si alguien querido se va apagando poco a poco y sabes que no puedes hacer nada, y te da rabia, impotencia... saber que no es su momento que te quedaban mil cosas con esa persona pero nunca lo valoraste porque sólo era alguien constante de un día más de tú vida. Pero en ese momento no es un día más, es un día menos... un día sabes que te despertaras y no va estar y entonces ¿que? No habrá más palabras, más charlas, más momentos... 
Te gustaría que no pasará, no estás preparado, no es su momento, quieres que tenga otra oportunidad, tener otra oportunidad tú mismo también y hacer y decir lo que nunca dijiste o hiciste con esa persona. 
No nos damos cuenta de lo que importa, son las personas, la gente que queremos, nos quiere, esa que pensamos que está ahí, aveces incluso que son un incordio. Jamás piensas que es la última vez que verás a nadie, nadie quiere pensar eso... pero siendo sinceros puede pasar... 
Da oportunidades, perdóna, vive la vida con los que quieres, haz las cosas que quieres, di te quiero, no pienses en un no, piensa en que esa persona lo sabe, lucha por quien quieres, está con quien quieras. Haz lo que te apetezca con quien te apetezca, no pienses en que dirán, en si el tiempo lo pierdes, etc. 
Pasa tiempo con esas personas que son constantes, por que no sabes cuánto queda. Dales momentos, recogelos también, atesoralos y aprende de ellos. 



No te arrepientas.


No dejes ir a esa persona la cual viste y sentiste que era para ti, esa que te hizo sentir, esa que te hizo reír, esa con la cual divagas, esa que pensaste que te compaginaba, esa con la cual estabas y te completaba, esa a la que querías ver otro ratito más, esa en la que siempre pensabas, esa con la que se te pasaban las horas, esa con quien charlabas y cada palabra valorabas, esa por la que no te importaba más nada, esa que es diferente, esa por la cual pase lo que pase todavía sientes y tienes en mente. A esa persona, no la dejes ir, lucha, tenla... por que si la dejas ir, luego te arrepientes.



Antes, ahora.


Hubiera sido fácil hablar con él como yo era antes, como nosotros éramos antes. Pero ya no somos los de antes, o quizás lo somos pero ya no entre nosotros. Ya no fluyen las bromas entre nosotros como cuando nos lo tomábamos todo sin analizar cada palabra que decimos, simplemente las decíamos y nos reíamos de eso. Reíamos por todo, da igual que le dijera lo tonto que es porque me iba a contestar con una sonrisa sin tomárselo a mal, pero no ahora. Ya no. Ahora no lo digo, porque le sentaría mal, se que no me iba a sonreír, y seguiría la broma a más. Todo cambio tanto, pero no encuentro el momento en el que pasó. Nose si fue por mí, fue por él, o los dos. Me gustaría saber que fue lo que cambió, donde empezó, si fui yo... Tal vez todo cambio el día en el que ninguno dio el paso por el otro, o cuando dejó de verme sólo como amiga pero yo no, o cuando el me vio sólo como amiga y yo no, aun que puede ser porque nos dolió. Le dolió mi no, luego me dolió su no. Puede que sea cosa mía, pero creo que en el fondo seguimos ahí los dos, sólo que no sabemos que hacer con eso. 



El pasado, atrás. 


Supongo que nunca esperas un "te quiero " de una persona que tienes ya en el pasado. Por lo menos no yo. Pero nos damos cuenta de las cosas cuando ya son demasiado tarde, se lo que es eso, pero también se la parte de que ya no es el momento. Todavía no me lo creo, o no quiero creérmelo, no se. Sólo se que me da igual. No quiero esas palabras no quiero que me las diga, no quiero escucharlas, no quiero que las repita... quizás en su momento, pero no ahora. Ahora no sólo pase página, si no que escribí nuevos capítulos, en ninguno de ellos estaba, y no va estar ahora. Tuvo los suyos, y fueron suficientes, suficiente por muchas cosas, y no se van a repetir. No siento dolor por lo que ya no es, no siento emoción por lo que dijo, no siento una ilusión... Sólo siento confusión. Alomejor en otro momento habría sentido que por fin se dio cuenta, o la ilusión de poder creer que quizás todo se arreglaría, que sería diferente, los nervios y el corazón que te va a mil, esa sensación en el estómago por que te habló, te dijo eso... Pero ahora ya, no es así. Ahora lo siento así, aunque la yo de ese entonces seguramente no sentiría confusión, pero si la ilusión. No es fácil pasar página, mucho menos varios capítulos, pero en esos capítulos hay nuevas personas que se hicieron notar, gente más importante que te volvió a conquistar, momentos vividos que dejaron otros atrás... puedo asegurar que cuando sigo otros capítulos, los que no continúan en ellos, los dejé atrás. Y yo no miró atrás. 



En el camino ganas y pierdes. 


Odio elegir o tomar decisiones, de algún modo u otro y para lo bueno o para lo malo siempre se acaba perdiendo escojas lo que escojas, pierdes todo, o pierdes una pequeña parte de algo y eso cansa...
Pero por mucho que nos joda, siempre hay que tomar decisiones. Y saber seguir con ellas, habiendo perdido esas partes, por las cuáles vamos a cambiar, vamos a llorar, ya no va a ser igual... Pero sólo puedes seguir, consecuente con tus decisiónes.



Cicatrices.


Hoy no quiere verte, ni Quizás mañana tan poco, ni al otro... aunque muy en el fondo eso no es verdad. Sólo que has echo que te empiece a detestar, que te coja manía, que te empiece a odiar... Hoy me pregunto si de verdad tendemos a pensar mal, si pensamos mal de las personas de las que desconfiamos porqué nos han fallado ya, o si desconfiados incluso de las que no.
Puedo decir, que prefiero un golpe físico, porque me dolerá unos días, quizás algo más, pero se me pasará. Pero el golpe que te hiere dentro, el de las palabras que nunca se van, las puñaladas que te dan, la desconfianza que te tienen sin motivo... esas heridas nunca se olvidan, no suelen sanar... Cuando alguien te engaña, pierdes una parte de ti mismo, una que puedes intentar recomponer, pero jamás volverá a estar bien. Cuando te insulta o desconfían sin Motivo aparente, cuando te dicen sólo lo mal que te ves, lo mal que haces todo.... etc... Es como algo rompiéndose dentro de ti, una parte que vas perdiendo, sin saber recuperarla... te quitan cosas, que te sientes vacía, sin saber ya si es verdad o mentira, pero por mucho que hagas, nunca está nada bien. Puedes seguir adelante, con esas cicatrices, no se ven, pero jamás se cierran... siempre están ahí, nunca vuelves a ser la que eras.
Y llega alguien, que es diferente que te cambia, y aunque intentes, tus pedazos rotos, la parte que te quitaron, jamás la recuperaras. Pero lo peor viene cuando pensando que es diferente, vuelves a caer en lo mismo... otra desconfianza más, otra acusación más... todo vuelve a empezar.
Prefiero un dolor físico, porque aun que deje cicatriz, esa se vuelve a cerrar... No dejes que personas así, vuelvan a entrar.
El perdón no arregla lo que has echo ya... pero aveces es mejor un perdón a tiempo, que uno que nunca va a llegar... 



Decisiónes. 


A veces las cosas llegan, sin más, sin que las esperes. Pero de eso trata todo, de tomar decisiónes, de saber lo que quieres, de elegir un camino... hay que coger al toro por los cuernos y afrontarlo. Hay situaciones que sólo se presenta una vez, puede que no, pero no lo sabes y no suele pasar el mismo tren dos veces. Cogelo o déjalo, Pero recuerda quizás no pase más, y no esperes porque el tren no espera. Todo pasa... Las cosas siguen, él tiempo pasa, no espera. Todo siempre trata de tomar decisiones. Hay algunas que dejamos atrás, quizás tarde, pero aprendemos a dejarlas. Otras que poco a poco soltamos, o las tomamos. Aveces no nos damos cuenta, sólo estamos dejándonos llevar, aveces es lo mejor, pero aún así nos estamos metiendo de lleno en algo, y cuando nos damos cuenta nos hemos subido o hemos dejado el tren. Para algunos estás palabras no tienen sentido, para otros si. Para mi quizás son mis desvaríos. Pero me entiendo. Tome mis decisiones, elegí mis trenes a los que subir y en los que bajar. Pero viví todos mis caminos, para bien o para mal. Sigo haciéndolo, y lo seguiré haciendo. Quizás hay veces que pienso que habría cogido otro tren o que quizás debí coger otro. Pero si en su momento elegí este es porque es lo que quería y necesitaba. Me cuestionó cuán difente sería haber elegido el otro, Pero sólo son cuestiones y no miró atrás. Me equivoque de tren muchas veces y otras tantas de los que deje pasar. Seguro seguirá pasandome, pero seguiré cogiendo el que crea y sienta en cada momento. Siempre puedes mirar el tren marchar o bajarte de el, pero no siempre tienes la oportunidad de subirte en el. 



Sigues en mi mente. 


Hoy la historia se repite, y tú recuerdo me golpea fuerte. Pensé que ya no más y ahí está otra vez, saliendo todo lo que enterre, es como un hierro candente a fuego grabado en mi piel y en mi mente.  Pensé que avance, pero aquí estoy otra vez, disputando con mi mente, creiendo que te saque, y así fue... brevemente. 
Pero hoy, mire a alguien con otros ojos, algo que todavía no puedo creer. Me aferre a eso, pensando en eso, pero todo volvió a suceder. La historia se repite y golpeó fuerte sacando las sensaciones y recuerdos que enterre. Quiero seguir avanzando sin que me golpe, sin sentir lo que sentí aquella vez, que todo sea diferente. 
Espero que rompa mis esquemas, que no me haga recordarte, poder mirarle sólo a él, sin tú recuerdo colgando. Espero que me haga bribrar, sólo él, y entonces avance, te olvidé.


No se dejarte ir...


No saber dejarte ir. Despedirme a destiempo, más con el inconsciente que con el consciente, sin darme cuenta, como uno más que no quiere aceptar el dolor de una perdida. No lograr controlar los decibelios de mi rabia y gritar sin siquiera ser capaz de escucharme a mi mismo.

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